Afirma que su marido está reencarnado en un VHS.

Así, a lo retro.

“Es que mi Francisco siempre fue muy antiguo”.

Efectivamente, tal y como reza el título de la noticia, Manolita Riel, como se llama la susodicha, lleva insistiendo en que su marido se ha reencarnado en una cinta de VHS desde el pasado mes de agosto. La situación al principio parecía controlada por los inquisidores de la ley local, pero el asunto se les ha ido de las manos tras los recortes en el terreno de la sanidad que vive Cataluña.

“Pues sí, para evitar problemas la mantuvimos drogada desde que empezó a decir lo que pasaba, pero ahora, que tiene que pagar ella parte de sus drogas, pues como que la cosa no va, no”.

Y es que la pobre viuda también ha visto reducirse su pensión de viudedad y con diecisiete hijos y tres gatos que mantener, todos ellos con la pensión de orfandad reducida varias veces, pues que no llega a fin de mes. “La semana pasada éramos 18, pero los gatos se comieron a uno de los medianos, por la noche, cuando los conté antes de acostarlos, me di cuenta de que faltaba” nos explica el hijo mayor, encargado de sus hermanos desde que todo esto empezara.

Ahora que las facultades mentales de esta buena señora están claramente definidas, ha vuelto a luchar por lo que es suyo hasta conseguir lo que realmente quería, que se acepte que su marido se ha reencarnado en una cinta de vídeo VHS.

“Sé que es mi Francisco porque desde que lo perdí he sentido su presencia en esta vieja cinta, aquí grababa yo los culebrones para verlos otra vez por la noche y hace una temporada que sólo veo nieve, sé que es él, lo siento, porque mi Francisco otra cosa no sé, pero antiguo fue siempre”. Nos relata orgullosa con la cinta en su mano.

"Pinchó la rueda del tren".

“Tal vez tenga algo que ver que el reproductor de VHS lleve desde agosto sin funcionar y que mi padre dijo de arreglarlo antes de morir, tal vez se haya reencarnado, no lo sé, pero mi madre está decidida” nos explica uno de sus hijos.

El juez del caso falló a favor de esta pobre señora para darle lo que quería. “Así podemos quitarles las pensiones que perciben y que se busquen la vida” aclaró tras la decisión.

Francisco falleció a raíz de un pequeño accidente de índole no laboral. “Mi Francisco siempre fue un poquito corto de entendederas, y quiso hacer eso de subirse al tren antes que los demás, saltó a la vía y… tardaron dos semanas en encontrar todos los trozos, incluso pinchó una rueda del tren con una astilla de muela, y eso que son de hierro”.

Por fortuna para esta familia, en la empresa donde Francisco movía botones de manera arbitraria lo han readmitido y puede seguir en su antiguo cargo.

“Antes era igual de soso, pero ahora es que nunca sabes si te está mirando o está pensando en sus cosas” nos explica uno de sus compañeros.

Para cerrar la noticia, diremos que la buena esposa nos ha informado que la semana pasada descubrió su nuevo embarazo, “cosa que nos llena de alegría en casa”.

Seguiremos informando.